Auge y caída del imperio de Xu Jiayin, fundador de Evergrande
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Pekín. 22 septiembre 2021
El individuo que llegó a ser el hombre más rico de China, Xu Jiayin, enfrenta el temor al efecto contagio de una posible quiebra de su inmobiliaria motiva desplomes en las Bolsa. El fundador de la endeudada inmobiliaria Evergrande, se convirtió en el hombre más rico de toda China. En 2017, el auge de su grupo provocó que este amante de los yates y las marcas de lujo desplazara al hasta ahora casi intocable Jack Ma, creador del gigante Alibaba, a lo más alto de las listas de multimillonarios del país. Forbes Calculó una fortuna personal de 45.000 millones de dólares (más de 38.000 millones de euros).
Pero ahora, habiendo llegado a la cima, está al borde del abismo. Su empresa, Evergrande, es el desarrollador inmobiliario más endeudado del mundo, con obligaciones que superan los $300 mil millones. Aunque su problema, de momento, no es tanto la gran cantidad de deuda como la crisis de liquidez que sufre y que le genera enormes dificultades para pagarla. El miedo a una quiebra que pueda arrastrar a todo el sector inmobiliario, y con ello a la economía de la segunda potencia del mundo, mantiene en vilo a inversores de todo el mundo.
Además, su fortuna personal se ha reducido. Hoy, después de que la promotora inmobiliaria perdiera el 84% de su valor este año, Xu solamente tiene 10.700 millones de dólares, según Forbes. La Revista Hurun lo ubica en el quinto lugar entre los magnates más grandes de China. La suya es una historia similar a la de muchos otros multimillonarios chinos que se hicieron a sí mismos, y corre paralela a la del propio país en los últimos setenta años: después de comenzar en la pobreza extrema, se impusieron en su sector gracias a su ambición y la personal conexiones que estaban dibujando. Y terminaron alcanzando riquezas y poder impensables al principio.
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